A ver niñes, Leticia con Z ha sacado nueva canción y yo no puedo hacer como si nada. Meteoritos en el corazón (lo que no me pase a mix), es el título de semejante temazo (me encanta ese afán que tienen de ponerle nombres eternos a las canciones). Quizá El umbral del dolor es relativo sea un buen título que cedo a Leticia con Z para que hagan un próximo tema (o a Fangoria si es que se da la remota casualidad de que Nacho o Alaska visiten mi blog), pero Meteoritos en el corazón es un título fastuoso. Espectacular. Genial. Genital. Fresquito, de canción chachi del verano de los 2000.
El single empieza con un sonido muy fresquito (si, eso ya lo he dicho para el título, pero es que es así también para el sonido); muy de canción dance chachi de los 90 cantado por una diva llena de plumas y purpurina. Y encima luego va a mejor, porque el estribillo es pegadizo nivel 5 estrellitas de 5 posibles: Siento meteoritos en el corazón / El mundo se acaba sin explicación / Bésame despacio mientras la explosión / Quédate a mi lado si se apaga el sol. Precioso. Sublime. Genial. Genital. Si se acaba el mundo (vamos si los brotes y rebrotes siguen en la misma línea), que me pille así. Por favor. Gracias.
Y la canción tiene otros versos tan impactantes y geniales como: Tu me has rozado y me ha gustado más de lo normal / Ser puritanos nos debería dar un poco igual / Este pecado lo deberíamos saborear. Amen.
En resumen, creo que Meteoritos en el corazón se pone a la par de Curry y melocotón y Fresa y regaliz en temas que me flipan mucho mucho de Leticia con Z. Ya me veo gritándola, osea cantándola como un gatito herido, mientras voy en el noquicar.
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