Cuando el perdón y el arrepentimiento no sirven de nada: Argi expulsada de Gran Hermano por una broma desafortunada

Que Argi hizo un comentario (en broma) muy desafortunado no lo niega nadie. Que la broma es muy fea y las víctimas del terrorismo no merecen un comentario así, también. Está claro que nadie en su sano juicio defiende el terrorismo. Pero la expulsión de Argi es totalmente desproporcionada. Ella se retractó y pidió perdón al instante. Y lo hizo de corazón. Su mala suerte fue hacer el comentario de la discordia en televisión. Porque no nos engañemos, bromas pesadas (incluidas sobre terrorismo) hemos hecho todos. Inclusive otros programas televisivos como, por ejemplo Vaya semanita, que hacen humor sobre una realidad como lo es, por desgracia, el terrorismo de ETA. Sin embargo, no hace falta buscar otros programas para oír bromas pesadas, en Gran Hermano (y no hace falta irse a otra edición), se le ha oído a los gemelos Montoya bromear sobre la muerte de Marta del Castillo. "Estás más perdida que Marta del Castillo", dijeron. Los mismos hermanos también han dicho que todos los vascos son etarras. Pero ellos no han sido expulsados por sus palabras. Ni lo serán. Ni se han retractado. Eso, sin olvidar sus comportamiento con la propia Argi, que rozó la violencia de género, o sus comentarios homófobos (han asegurado que prefieren estar muertos que ser gays).

Mediaset ha tenido miedo a perder los anunciantes, como pasó con La noria. Eso o, lo que sería peor, han preferido hacer circo de un comentario desafortunadisimo. Mezclar política y entretenimiento no está bien. Todo no vale por la audiencia señor Vasile. Y señora Mercedes Milá, una periodista como tú, que tantas veces ha defendido la utilidad de un perdón a tiempo, no puedes defender la expulsión de Argi. Tú sabes que es una chica joven a la que se la ha ido la boca. Y tu misma has tenido que rectificar muchas veces palabras dichas fuera de tono, como cuando le dijiste a Amor que como había sido hombre y mujer que opinará de determinado tema con un tono muy desafortunado. Yo, por lo pronto, y me consta que no voy a ser el único, no volveré a ver Gran Hermano hasta que no se readmita a Argi.